NUESTRAS AGUAS
Las aguas mineromedicinales del Balneario del Cabriel, emanan del Manantial Fuentepodrida, declaradas de utilidad pública en 1871, son aguas sulfurado-cálcicas y sulfhídricas y al brotar emanan gas sulfhídrico debido a las bareginas, que mediante el ciclo del azufre producen su característico olor y color.
Dentro de las aguas mineromedicinales, las que mayor propiedades terapéuticas tienen son las aguas sulfuradas. El azufre reducido es el principal responsable de la actividad de estas aguas, conjuntamente con otros muchos componentes de las mismas.
La composición de las aguas le confiere propiedades que determinan sus acciones terapéuticas. Está indicada en patologías crónicas como reumatismos, artrosis o artritis reumatoide. Hay que destacar que está especialmente indicada en patologías de la piel como psoriasis, eccemas, dermatitis, etc. Su efecto mucolítico y descongestionante, unido a la actividad bactericida del azufre, la hace especialmente beneficiosa en patologías respiratorias como alergias, sinusitis, rinitis, bronquitis, asma.
Tienen acción estimulante, aumentan la permeabilidad vascular mejorando problemas circulatorios como varices, piernas cansadas, mala circulación venosa, celulitis...
Por último, también actúa sobre el sistema nervioso, con propiedades analgésicas, relajantes, descontracturantes y antiestrés.
En cuanto a balneoterapia, las técnicas de balneario son prescritas y supervisadas por el director médico, que prescribe el tratamiento personalizado que combinará las distintas técnicas que describimos en la sección BALNEARIO de la web, con el objetivo de tratar diversas enfermedades. Entre las técnicas de las que dispone el balneario destacan las que se aplican por vía respiratoria y las que se aplican por vía tópica.